por EL UNIVERSAL
13/03/2024 13:03 / Uniradio Informa Baja California / Ciencia y tecnología / Actualizado al 13/03/2024
MÉXICO.- Determinar cuándo una persona comienza a ser considerada "vieja" es un concepto relativo y culturalmente influenciado. Sin embargo, la ciencia ha encontrado formas de determinar la edad fisiológica de una persona mediante el análisis de las proteínas en su sangre. Investigadores de la Universidad de Stanford han descubierto que las proteínas en la sangre pueden revelar la edad fisiológica de una persona, lo que puede indicar si el envejecimiento se está acelerando o si el cuerpo se mantiene más joven.
El profesor de neurología y codirector del Centro de Investigación de la Enfermedad de Alzheimer de Stanford, Dr. Tony Wyss-Coray, lideró este estudio que fue publicado en la revista Nature Medicine. El equipo de investigación analizó el plasma de más de 4,000 personas de entre 18 y 95 años, identificando 1379 proteínas cuyos niveles variaban significativamente con la edad. De estas proteínas, un conjunto reducido de 373 fue suficiente para predecir con precisión las edades de los participantes.
Según Wyss-Coray, las proteínas son fundamentales para el funcionamiento del cuerpo, y los cambios en sus niveles pueden indicar cambios en el individuo. Los resultados del estudio revelaron tres puntos de inflexión distintos en el ciclo de vida humano, que ocurren en promedio a las edades de 34, 60 y 78 años. Estos puntos representan momentos en los que la cantidad de proteínas en la sangre muestra cambios notables en abundancia.
Los hallazgos también sugieren que hombres y mujeres envejecen de manera diferente, con casi dos tercios de las proteínas predictivas de edad siendo más significativas para un sexo que para el otro. Esto respalda la importancia de considerar el sexo como una variable biológica en la investigación médica.
Si bien este estudio se centra en la investigación básica, sus resultados podrían tener aplicaciones clínicas en el futuro. Podrían ayudar a identificar a las personas en riesgo de padecer enfermedades relacionadas con la edad y también a evaluar el impacto de los medicamentos en el envejecimiento del organismo.