Cómo aumentar el valor de tu empresa: el secreto está en el flujo de caja

Por Kevin Villatoro

Como consultor, una de tus mayores prioridades, y a menudo uno de tus principales dolores de cabeza, es encontrar la manera de aumentar el valor de tu negocio de manera efectiva.

Comprender las finanzas de tu empresa es fundamental para lograr este objetivo. Sin embargo, los estados financieros complicados suelen dificultar la identificación de los números que realmente importan en tu negocio.

Por eso quiero ofrecerte una manera más sencilla de abordarlos. Aquí te comparto 5 ideas clave para entender cómo tus finanzas impactan en los resultados finales. Estas ideas están diseñadas para que tú y tu equipo aprendan a amar los números, lo que te permitirá tomar decisiones inteligentes para aumentar tus ganancias, flujo de caja y valoración empresarial. A continuación, te las presento:

1. El verdadero indicador de tu negocio es el flujo de caja.
Como consultor empresarial, he dedicado la mayor parte de mi vida profesional a revisar, simplificar los números. Mi trabajo me ha llevado a colaborar con más de 100 empresas en México y Estados Unidos, ayudando a personas, negocios y empresas a cambiar su perspectiva sobre las finanzas.

Una constante que he observado entre los emprendedores es que siempre hablan de ganancias e ingresos, pero rara vez mencionan el flujo de caja. Sin embargo, cuando vas al banco, lo que realmente les importa es tu capacidad para pagar tus deudas, lo que se refleja en el flujo de caja. También necesitas efectivo para financiar el crecimiento de tu negocio.

De lo que quizás no te hayas dado cuenta es que las ganancias y los ingresos son solo parte de la historia financiera de tu empresa, y esos elementos influyen directamente en tu flujo de caja. Por eso siempre digo: el verdadero resultado de tu negocio es el flujo de caja.

Necesitas enseñar a tu equipo a jugar el juego de los negocios, que se resume en: "¿Cómo mejoramos nuestras ganancias, flujo de caja y valor?"

Aprende a gestionar fácilmente el flujo de caja de tu negocio y luego enséñalo a tu equipo. Así es como logras que todos en la empresa sean responsables del crecimiento y la valoración.

2. No pases por alto tu balance general.
La mayoría de las empresas se enfocan únicamente en el estado de resultados, quizás porque parece más fácil de entender. Sin embargo, nunca llegarás a ser un verdadero narrador financiero si no prestas atención también a tu balance general.

Tu balance general lista todos los activos, pasivos y patrimonio de tu empresa, y es mucho más fácil de leer de lo que piensas, ya que se basa en una simple ecuación:

Tu financiación debe igualar tus operaciones.
Financiación (Deuda + Patrimonio) = Operaciones (Capital de Trabajo + Otros Capitales).
Es una ecuación que siempre debe estar equilibrada.

3. Tu equipo de gestión es responsable del capital de trabajo y las ganancias.
Dentro del balance general, tu equipo de gestión es responsable de tres elementos:

Cuentas por Cobrar - Cuán rápido te pagan los clientes.
Inventario - O tu trabajo en progreso.
Cuentas por Pagar - Cuán rápido pagas a tus proveedores.

Estos tres elementos conforman tu capital de trabajo. Cada mes o trimestre, o en el ritmo que funcione para tu negocio, tu equipo de gestión debe monitorear estos elementos y hacerse las siguientes preguntas:

¿Cómo podemos cobrar más eficientemente? ¿Podemos educar a nuestros clientes para que nos paguen más rápido? ¿Podemos facturar por adelantado algunos trabajos? ¿Hay alguna forma de reducir nuestro inventario? ¿Podemos renegociar los términos con nuestros proveedores?

4. El CEO es responsable del resultado del negocio.
El resultado de tu negocio es el flujo de caja neto, que simplemente es el cambio en todos tus saldos bancarios. El CEO es responsable de este número.

Uno de los mejores CEOs con los que he trabajado es el anterior director de una importante financiera en Estados Unidos, quien logró multiplicar por 10 el valor de la empresa. Cuando le pregunté cómo lo hizo, me dijo: "siempre escucho con empatía. Me pongo en los zapatos de los demás."

Este es el aspecto clave que debes recordar si quieres ser un mejor CEO y escalar tu negocio más rápido desde el lado del flujo de caja.

Incluso si no eres una persona de finanzas, puedes ser el L.I.D.E.R. que sabe cómo jugar el juego de los negocios:

L - Escuchar (Notarás que "escuchar" tiene las mismas letras que "silencio". Un buen líder es la última persona en hablar en la sala.)
I - Empatía, liderar y escuchar con empatía
D - Decisiones, saber cómo tomar decisiones difíciles
E - Energizar, saber cómo energizar a tu empresa
R - Resiliencia (No es cuán bajo caes, sino qué tan rápido como líder puedes hacer que la empresa se recupere.)
Escucha a tu equipo de gestión con empatía. Muéstrales que el efectivo es el resultado del crecimiento y la gestión.
Luego, reúnanse para trabajar juntos en los cambios que tu empresa necesita para mejorar su flujo de caja.

5 Para ganar, gebes ajustar y repetir, repetir, repetir
Recuerda: estamos jugando un juego y ese juego es cómo optimizar tus ganancias, flujo de caja y valor.

Debes ser disciplinado y reunirte con tu equipo de manera trimestral o mensual para analizar qué cambios puedes hacer para mejorar tu flujo de caja.

El "Power of One Tool" que mis socios y yo hemos desarrollado te ayudará a guiar estas reuniones, para que puedas enfocarte en las mejores decisiones financieras a tomar.

Crea este hábito con tu equipo de contar tu historia financiera una y otra vez, para que realmente puedas entender cómo escalar tu empresa.

Enfócate en lo que tú y tu equipo pueden controlar
Nunca antes el flujo de caja ha sido más importante para tu negocio.
Si quieres mantenerte al tanto —y estar preparado para cualquier calamidad que pueda afectar tu negocio— necesitas convertirte en un narrador financiero.

¿Cuál es la historia que tu flujo de caja está contando sobre tu negocio y cuál es la calidad de ese flujo de caja?

Cuando puedas contar esta historia, podrás educar a tu equipo sobre cuáles decisiones realmente impactan el valor de tu empresa y luego crear el hábito de tomar esas decisiones.

Así es como aprenderás a amar los números que te ayudan a impulsar el crecimiento de tu negocio.