por Kevin Villatoro
27/12/2024 10:20 / Uniradio Informa Baja California / Columnas / Actualizado al 27/12/2024
Es posible aplicar algunas strategias empresariales para mitigar riesgos y fortalecer la competitividad
Por Kevin Villatoro
En el entorno empresarial de Baja California, la percepción de inseguridad pública y el incremento de actos delictivos generan una preocupación creciente que impacta, de manera directa e indirecta la toma de decisiones de inversión. El reto no se limita únicamente a proteger activos e infraestructura; también abarca la gestión de la reputación, la retención de talento, la dinámica con proveedores y la relación con clientes e inversionistas internacionales. En este contexto, los líderes empresariales se enfrentan a la necesidad de diseñar y ejecutar estrategias integrales de mitigación de riesgos que salvaguarden la operación y fortalezcan la competitividad de sus empresas.
Una Perspectiva Integral del Riesgo
La inseguridad no es un fenómeno aislado; es un factor que influye en múltiples dimensiones del negocio. Por un lado, la incertidumbre generada por la delincuencia puede frenar la expansión, retrasar proyectos de infraestructura o encarecer las cadenas de suministro al requerir seguros, rutas alternas y una mayor complejidad logística. Por otro, puede afectar la marca empleadora: los profesionales altamente calificados pueden mostrarse reticentes a relocalizarse en una zona percibida como insegura, dificultando la retención y atracción de talento.
Los Principales Desafíos para los Inversionistas
1. Aumento de Costos Operativos: La necesidad de reforzar la seguridad con personal capacitado, tecnología de vigilancia, sistemas de rastreo y transporte seguro encarece la operación y reduce márgenes.
2. Daño Reputacional: Una reputación de inseguridad afecta la percepción de socios, inversionistas y clientes internacionales, complicando la negociación de nuevos contratos o la obtención de financiamiento.
3. Entorno Regulatorio Fluctuante: La respuesta gubernamental a la inseguridad puede traducirse en cambios regulatorios, nuevos requerimientos de cumplimiento y costos adicionales por certificaciones o auditorías externas.
Recomendaciones Estratégicas para la Alta Dirección
Para abordar estos retos, las empresas pueden adoptar un enfoque proactivo y multidisciplinario, similar a las mejores prácticas internacionales en entornos complejos:
1. Integrar la Gestión de Riesgos en la Estrategia Corporativa:
• Establecer un equipo interno o trabajar con consultores externos especializados en análisis de riesgo, que puedan evaluar de forma sistemática y periódica la vulnerabilidad de las distintas unidades de negocio.
• Desarrollar planes de contingencia y protocolos de actuación ante incidentes: desde la respuesta inmediata hasta la comunicación transparente con empleados, clientes y socios.
2. Fortalecer la Colaboración con las Autoridades y la Comunidad:
• Participar activamente en cámaras empresariales, consejos coordinadores y foros públicos para contribuir al diseño de políticas públicas de seguridad más efectivas.
• Apoyar iniciativas de responsabilidad social corporativa centradas en la prevención, educación y recuperación del tejido social, lo que a mediano plazo contribuye a reducir los índices delictivos y mejora la percepción colectiva.
3. Invertir en Tecnología y Capacitación Interna:
• Implementar sistemas de videovigilancia inteligente, análisis predictivo de riesgos e identificación biométrica para detectar patrones inusuales en tiempo real.
• Capacitar al personal interno en protocolos de seguridad, primeros auxilios y respuesta ante incidentes, fortaleciendo la cultura preventiva dentro de la organización.
4. Diversificar la Red de Proveedores y Canales Logísticos:
• Reducir la dependencia de rutas o proveedores críticos que pudieran verse afectados por la inseguridad.
• Considerar la implementación de seguros especializados, el uso de operadores logísticos certificados y la segmentación de entregas para minimizar pérdidas y vulnerabilidades en la cadena de suministro.
5. Comunicar con Transparencia y de Manera Proactiva con los Inversionistas:
• Desarrollar reportes periódicos sobre el estado de seguridad de las operaciones, las medidas implementadas y los resultados obtenidos.
• Enfatizar las iniciativas de resiliencia organizacional en las presentaciones a inversionistas, demostrando que la empresa cuenta con un plan sólido para navegar contextos complejos.
Construyendo un Entorno Más Predecible y Seguro
Si bien los retos en materia de seguridad pública en Baja California no se resolverán de la noche a la mañana, las empresas pueden asumir un rol activo y estratégico. La conjugación de colaboración público-privada, inversión en tecnología, fortalecimiento del capital humano y comunicación transparente hacia los grupos de interés puede sentar las bases para un entorno más estable, que redunde en mayor confianza, flujos de inversión sostenidos y crecimiento a largo plazo.
En última instancia, aquellas organizaciones que asuman el liderazgo para gestionar los riesgos inherentes a la inseguridad, no solo preservarán su competitividad actual, sino que también estarán mejor posicionadas para impulsar el desarrollo económico de la región y generar valor sostenible para todos sus stakeholders.