18/07/2023 17:55 / Uniradio Informa Baja California / Gobierno / Actualizado al 18/07/2023
SAN DIEGO.- La Junta de Supervisores del Condado de San Diego aprobó el uso de $44.3 millones de dólares en fondos estatales del Programa de Vivienda Puente de Salud del Comportamiento para proporcionar más viviendas a los habitantes de San Diego que tienen condiciones graves de salud del comportamiento y no tienen hogar.
Los fondos ayudarán a abordar la necesidad de camas de pensión y cuidados que suelen ser entornos hogareños para cinco o seis adultos o personas mayores que necesitan atención especializada, pero no en un hospital o entorno clínico.
En 2022, la Junta aprobó el Modelo de Vías de Atención Óptima, que es el resultado de una revisión profunda de los datos actuales e históricos y los modelos de atención existentes para comprender mejor y proyectar las necesidades regionales. Las recomendaciones guiadas por el modelo Optimal Care Pathways indican que la región necesita aumentar la capacidad de alojamiento y atención en casi un 150 %. Esto se traduce en unas 450 camas adicionales para ayudar a esta población vulnerable.
"Esta financiación llega en un momento de creciente necesidad de más recursos de vivienda para la salud del comportamiento", dijo el Dr. Luke Bergmann, director de Servicios de Salud del Comportamiento. "Estos nuevos fondos nos permitirán preservar y optimizar la infraestructura de atención comunitaria actual en consonancia con el modelo Optimal Care Pathways y ayudar a garantizar que las personas más vulnerables obtengan la atención y la vivienda que necesitan".
La acción de hoy asigna $41.5 millones para nuevos pagos de pensión y atención para complementar los fondos para los clientes de Medi-Cal y ayudarlos a cubrir los crecientes costos de alquiler de pensión y atención.
Los $2.8 millones restantes se utilizarán para costos de puesta en marcha de infraestructura para acelerar la creación de nuevas camas.
Los usos aprobados para los fondos del Programa de vivienda puente de salud conductual incluyen la contratación de más trabajadores de vida asistida, divulgación y participación, y gastos de infraestructura y vivienda de puesta en marcha, que incluyen refugio, vivienda provisional, asistencia de alquiler y fondos de parche para entornos de vida asistida y navegación de vivienda.
