por Uniradio Informa
29/02/2024 20:29 / Uniradio Informa Baja California / Gobierno / Actualizado al 29/02/2024
Dip. Montse Murillo presenta una iniciativa para adicionar la Ley de Asistencia Social de Baja California
MEXICALI.- Con el objeto de promover el reconocimiento de las personas indigentes como titulares de derechos frente a la sociedad, la diputada Dunnia Montserrat Murillo López presentó una Iniciativa para adicionar un artículo de la Ley de Asistencia Social de Baja California.
Las personas en situación de calle viven bajo un complicado estigma, y si existe alguien que no tiene derechos, son ellos; la mayor parte de la sociedad los visualiza como delincuentes, como adictos o simplemente vagos, no se les considera su calidad como seres humanos, y se puede encontrar a algunos de ellos dentro de prácticas ilícitas, así como a cualquier otro ciudadano.
Por no contar con un documento oficial de identidad, las personas que viven en condiciones de indigencia, quedan al margen de toda política pública dirigida a las poblaciones más vulnerables; sufren la intemperie, la calle, la violencia, discriminación y el absoluto olvido.
No puede decirse que los individuos en estado de indigencia son un tipo de seres, es más apropiado señalar que son personas como cualquiera de nosotros. Sin embargo, por distintas circunstancias de la vida, se encuentran en determinadas condiciones de abandono, normalmente a causa de la pobreza extrema, padecimientos de enfermedades mentales, desintegración del núcleo familiar o social, desempleo y consumo de drogas.
En México, actualmente se desconoce la cifra exacta de personas en situación de indigencia. Según la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) estimó que en el país existen aproximadamente 14 millones de personas, en esta condición.
Sin embargo, el INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía) en 2020 calculó que solo en la Ciudad de México, Baja California y Jalisco, habitaban más de 5 mil 700 personas en estado de indigencia.
Este grupo de personas es diverso, integrado por niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad; incluso lo componen familias enteras, migrantes y personas con discapacidad.
Y todas tienen en común que subsisten en la calle, a través de recursos precarios, sus vínculos familiares están fragilizados, y utilizan como vivienda de manera temporal o permanente, los espacios públicos.