por Octavio Fabela
31/08/2023 04:00 / Uniradio Informa Baja California / Reportajes especiales / Actualizado al 30/08/2023
TIJUANA.- De no lograr acuerdos que satisfagan a los agentes activos y discapacitados, en mejoras salariales y prestaciones de seguridad social, la Asociación de Policías de Tijuana podría llamar al paro de labores para presionar al gobierno de la ciudad.
En entrevista, en el marco de una manifestación que convocó la Asociación de Policías en el palacio municipal, su presidente, el oficial Noé Ramírez Ibarra sostuvo que la principal exigencia es que se presupuesten los recursos para el pago de la seguridad social.
"Todo se va a definir después del día de hoy. Si después del día de hoy nos llevamos un sabor amargo, pues yo creo que sí vamos a tener que plantear un paro laboral bien diseñado, donde no se afecte a la ciudadanía al cien por ciento" declaró el representante de mil 200 agentes.
Añadió que es importante que los ciudadanos reconozcan que hacen falta los policías municipales pues, aunque hay otras instancias como la Guardia Nacional o el Ejército, esas corporaciones tienen funciones distintas.
Por otro lado, el oficial Wilfrido García Cervantes quien enfrenta una discapacidad permanente tras un atentado en la Zona Norte el 24 de septiembre de 2016, dijo que la alcaldesa si olvida porque tiene abandonados a los oficiales que han sido heridos en el cumplimiento del deber.
Narró que luego del incidente en el que estuvo a punto de perder la vida, el ayuntamiento no ha apoyado en nada para su rehabilitación y que los seis mil pesos que gana como salario no son suficientes para la manutención de su casa.
Mientras que la oficial María Luisa con 20 años de servicio como despachadora, desmintió que los oficiales con menores rangos cobren 20 mil pesos, dice que hace diez años no recibe aumento salarial y que en la misma condición están varios de sus compañeros.
Lamentó que las viudas de policías caídos en cumplimiento del deber no reciban la pensión a la que tienen derecho sus hijos y que es común que estén solicitando préstamos y ayuda para sostener sus hogares.
En tanto el oficial Justiniano Cuitláhuac, sobreviviente de una emboscada ocurrida en el año 2009, en aquella ocasión tres de sus compañeros murieron y el salvo la vida, pero tiene secuelas que le impiden trabajar.
Aseguró que desde entonces cobra un salario de seis mil pesos por lo que hizo un llamado a la alcaldesa Monserrat Caballero y al secretario de seguridad Fernando Sánchez para que sean empáticos con los oficiales que están incapacitados por ataques armados.
Por su parte, el ex oficial Genaro Rodríguez Flores sufrió fractura de cadera luego de ser embestido por una pipa mientras realizaba un patrullaje, pese a que fue aceptada su incapacidad, fue dado de baja por lo que ahora no percibe salario ni puede trabajar.
Tras la manifestación directivos de la Asociación de Policías se reunieron con autoridades donde acordaron una mesa permanente de trabajo y se confirmó que el once de septiembre escucharán las propuestas del gobierno municipal.