VIDEO: Un piano instalado en el Centro de Tijuana es aprovechado por aprendices, músicos y "palomazos"
TIJUANA.- Por las tardes al salir de su trabajo, Víctor se toma un tiempo para practicar su actividad favorita, tocar el piano.
Y lo hace en este instrumento musical que es dispuesto de manera libre por el Instituto Municipal de Arte y Cultura de Tijuana para quien desee aprovecharlo.
Se encuentra en la entrada del antiguo palacio municipal, en pleno centro de la ciudad.
Ángel, quien es un joven que acude a tocar el piano público por las tardes, comentó que le queda de ida hacia la Universidad "así que cuando tengo tiempo paso y lo toco. Por noviembre y diciembre antes venía un joven que venía a tocar piano, excelente tocando y gracias a él me inculcó más el aprender piano y ahora ando aquí.
Nunca he tomado una clase formalmente. Yo había escuchado algunas canciones que me habían gustado pero como no tener un piano en casa adecuado para esas canciones, como tal no podía practicarlas. Y al tener el piano aquí si puedo practicarlas. Trato de pasar una vez al día".
Son ya varios quienes acuden periódicamente a su encuentro con las teclas de este piano, el cual fue rehabilitado luego de permanecer por un largo tiempo en bodegas municipales.
Algunos son principiantes que empíricamente aprenden algun tema musical, mientras que otros lo aprovechan para poner en práctica sus habilidades artísticas.
Victor Hernandez, es otro que aprovecha el piano público. El dijo "me queda de pasada por mi casa y es mas grande para practicar. Tome unas sesiones en YouTube y ya. Se puede decir que no soy músico. Tenía un amigo con el que patino que me enseñó el piano y de ahí empecé a venir todos los días. Me gustaría aprender formalmente con clases así, estaría muy bien. No lo he hecho por dinero más que nada y tiempo, me imagino que sería todos los días y tardes".
En la actualidad aunque se puede acceder fácilmente a dispositivos electrónicos que emulan el sonido de pianos, se asegura que nada se compara con la experiencia de tocar, escuchar y, hasta sentir las vibraciones que se producen en un instrumento real.