por Redacción
31/01/2025 11:39 / Uniradio Informa Baja California / Salud / Actualizado al 31/01/2025
MEXICALI.- Cuando se trata del embarazo, es importante conocer los aspectos médicos que podrían influir en la decisión de hacerse un tatuaje en esta etapa. Por lo anterior, el Hospital Materno Infantil emite la siguiente información.
José Rojas Serrato, Director del nosocomio indicó que, aunque no existe evidencia científica concluyente que demuestre que los tatuajes sean peligrosos para el bebé, las mujeres embarazadas enfrentan ciertos riesgos adicionales que deben tener en cuenta, pues durante esta etapa los niveles hormonales fluctúan, lo que puede afectar la piel.
Si bien el embarazo es un momento único, no es el más adecuado para realizarse tatuajes debido a los riesgos asociados con cambios en la piel, mayor susceptibilidad a infecciones y alteraciones hormonales.
"Esto puede generar cambios en la textura y elasticidad de la piel, lo que puede interferir con el proceso de cicatrización. Los tatuajes realizados en piel que está cambiando constantemente pueden no cicatrizar de manera óptima, lo que aumenta el riesgo de infecciones o de que el tatuaje no quede como se espera" explicó.
Otro factor importante es el mayor riesgo de infección. Durante el embarazo, el sistema inmunológico está más sensible, lo que hace que las mujeres sean más propensas a desarrollarlas.
"Los tatuajes requieren un proceso de curación, y cualquier herida abierta puede ser susceptible a bacterias. Un tatuaje realizado en condiciones no controladas o con herramientas no estériles podría aumentar significativamente este peligro", añadió.
Adicionalmente, las mujeres embarazadas pueden experimentar cambios en la piel, como mayor sensibilidad o reacciones alérgicas a tintes o pigmentos. Esto podría resultar en irritaciones, enrojecimiento o reacciones alérgicas indeseadas.
Se recomienda esperar al menos 6 semanas después del parto antes de hacerse un tatuaje. Durante las primeras semanas, el cuerpo está en proceso de recuperación, y la piel está aún más sensible y susceptible a infecciones. Asegurarse de que la piel esté completamente recuperada permitirá un proceso de curación más seguro y efectivo.
En cuanto a la lactancia, se recomienda esperar para hacerse un tatuaje durante este período. Si bien no hay evidencia que sugiera que las tintas utilizadas en los tatuajes afecten la calidad de la leche materna, el proceso de curación podría interferir con la lactancia, especialmente si el tatuaje se realiza en áreas cercanas a los senos o la parte superior del cuerpo. Además, el estrés o la incomodidad derivados del tatuaje podrían impactar temporalmente la producción de leche.
La recomendación del HMIM es postergar el tatuaje después del parto y la lactancia para asegurar un proceso seguro y satisfactorio. Es importante consultar siempre con un especialista y asegúrate de que el estudio y la higiene del lugar, sean óptimos para evitar cualquier complicación.
