por Octavio Fabela
12/06/2023 16:08 / Uniradio Informa Baja California / Sociedad / Actualizado al 12/06/2023
Por: Octavio Fabela
TIJUANA.- Para abatir el rezago de cinco mil policías que necesita Tijuana se deben mejorar las condiciones laborales de los agentes, además de que los gobernantes suman el problema de la inseguridad como algo que deben resolver por ellos mismos.
En entrevista, Francisco García Burgos, Presidente de la Fundación Educando Conseguimos Paz (EduPaz), sostuvo que además de que no existe estrategia de prevención del delito, existe un déficit de policías, ministerios públicos y jueces que favorece la impunidad.
Citó el ejemplo del rezago que hay de agentes de la policía municipal "Tijuana necesita 7 mil policías y solo hay 2 mil, pero de la academia el año pasado apenas egresaron 43 nuevos policías" por lo que es necesario mejorar las condiciones laborales para que sea atractivo convertirse en un oficial.
Refirió que en la medida que no se atiendan los déficits de policías, jueces y ministerios públicos los criminales ganarán mas fuerza y no habrá instituciones fuertes que puedan enfrentarlos.
Consideró además que es necesario que quienes gobiernan asuman el problema de inseguridad como un asunto que deben resolver ellos mismos, ya que actualmente tanto el estado y municipio esperan que la violencia la combata el gobierno federal.
Aseguró que en la medida en que la seguridad sea vista como una prioridad, se asignarán los presupuestos suficientes para atenderla, y para los programas efectivos de prevención del delito que deben diseñarse para dar resultados en el corto, mediano y largo plazos.
"Creo que lo que hace falta es que nuestros gobernantes asuman el tema de seguridad como algo que tienen que resolver ellos, no voltear a ver a alguien más. Mientras sigan volteando a ver el municipio al estado, y el estado a la federación, y la federación al municipio, no van a tomar al toro por los cuernos. Necesitan asumirlo como su responsabilidad y entonces va a venir el tema de presupuesto", concluyó.