Presenta Agricultura, avances de la investigación del proyecto "Alternativas al glifosato para el control de malezas en México"
MEXICALI.- El Representante de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en el Estado, Ingeniero Juan Manuel Martínez Núñez, anunció que el uso de algunos bioherbicidas son una alternativa al glifosato para el control de malezas, sin embargo, debe hacerse con un manejo integral, así se dio a conocer durante la presentación de los avances de la investigación del proyecto "Alternativas al glifosato para el control de malezas en México", presentado por el Dr. Luis Miguel Tamayo Esquer, investigador del INIFAP y Coordinador Nacional del Proyecto.
El funcionario federal señaló que para lograr lo anterior, es importante ejecutar el proceso habitual de la maquinaria en el campo, pero en otra secuencia de tiempo, con lo que es posible reducir las malezas en un 30%, en el caso del trigo, por ser un cultivo importante en el Valle de Mexicali.
"Si se barbecha en junio y rastrear en agosto para dar tiempo a que germine la maleza perene, es posible controlarla para sembrar trigo en noviembre o diciembre, y que comience con menos población. Una vez ya germinado el trigo, está la opción de sembrar en surco o hacerlo a tierra venida, además de implementar el control biológico; ya hemos visto que con el uso de ácaros y organismo, es posible controlar la maleza", explicó.
Martínez Núñez añadió que, sumado a lo anterior, para lograr un mejor resultado de los bioherbicidas, deben mejorarse las condiciones del agua en el que se utilizará el producto, así como el uso de las herramientas para su aplicación.
Por otro lado, el Dr. Luis Miguel Tamayo Esquer, investigador del INIFAP y Coordinador Nacional del Proyecto, declaró que los resultados presentados durante esta plática obedecen a ofrecer alternativas de productos para combatir las malezas, con el propósito de reemplazar el glifosato, establecido en el decreto presidencial emitido en febrero de 2023.
El investigador mencionó que, para lograr resultados, es importante integrar el control biológico con la implementación del ácaro agallador, métodos culturales que se utilizan de manera regular, así como del uso de coberteras en frutales.
"Es importante complementarlo con el uso del control químico con bioherbicidas, que han sido desarrollados para la agricultura orgánica, que son menos agresivos al medio ambiente", indicó.