Supervisores del condado aprueban plan de trabajo para reducir la violencia armada
CALIFORNIA.- La Junta de Supervisores del Condado de San Diego aprobó un plan integral destinado a reducir la incidencia de la violencia armada en la región.
El plan, respaldado por la Junta, se basa en las recomendaciones detalladas en el Informe final de evaluación de necesidades comunitarias sobre violencia armada, elaborado por Health Assessment and Research for Communities.
Con un total de 17 acciones específicas, el plan busca proteger y prevenir la violencia asociada con el uso de armas de fuego en el Condado. Además, se aprobó la creación de un nuevo puesto de personal dedicado a coordinar las actividades relacionadas con la reducción de la violencia armada, así como la autorización para presentar solicitudes de subvenciones.
El informe evaluó las poblaciones más afectadas por la violencia armada en términos de muertes, lesiones y delitos, teniendo en cuenta variables como raza, edad y género. Entre 2017 y 2022, más del 70% de las muertes por armas de fuego en el Condado de San Diego fueron casos de suicidio, mientras que más del 28% fueron homicidios. Destacadamente, una de cada cinco muertes relacionadas con armas de fuego involucró a veteranos, y el 93,3% de estos casos fueron suicidios.
Las recomendaciones del informe se enfocaron en fortalecer servicios que respaldan programas de intervención y prevención de la violencia, especialmente en comunidades con un mayor riesgo, así como en el ámbito de la violencia doméstica y de pareja.
Además, el informe resaltó la importancia de abordar la salud mental, establecer programas de tutoría para jóvenes, aplicar medidas más estrictas contra el crimen, realizar verificaciones exhaustivas de antecedentes y asegurar financiamiento para organizaciones comunitarias.
El proceso de evaluación de necesidades se llevó a cabo con una estrecha colaboración y participación de la comunidad. Se estableció un Grupo Asesor Comunitario para la Reducción de la Violencia Armada, el cual brindó valiosos aportes y comentarios para identificar las necesidades prioritarias de la comunidad. Además, se organizaron eventos de networking y sesiones de escucha con organizaciones comunitarias de diversos sectores.
Finalmente, la Junta de Supervisores ordenó la preparación de un informe anual sobre la violencia armada en el Condado de San Diego. Se espera que el personal del condado regrese a la junta a principios de 2025 con una actualización sobre las acciones tomadas para implementar el plan de trabajo.