25/11/2024 08:14 / Uniradio Informa Baja California / Sociedad / Actualizado al 25/11/2024
-Como sociedad, es crucial dejar de culpabilizar a las mujeres por su situación de abuso. Debemos reconocer estos actos como lo que son: ataques contra su dignidad y concientizar que existe el derecho a una vida libre de violencia, expresa Experta CETYS
MEXICALI.- En el marco de este 25 de noviembre en el Día internacional para la eliminación de la violencia contra la Mujer, en donde la violencia de género es una problemática social creciente que, a pesar de los esfuerzos de prevención y atención realizados por diversas organizaciones civiles, sigue afectando a miles de mujeres. ¿Qué falta para que esta violencia disminuya y, finalmente, se erradique?, planteó la Psic. Alma Karina Zazueta López, docente de la escuela de psicología y mentora del Centro de Desarrollo Estudiantil de CETYS Universidad Campus Mexicali.
La Experta CETYS destacó la relevancia de desmentir mitos comunes sobre la violencia hacia las mujeres, tales como la idea de que el estatus social o educativo influye directamente en el riesgo de ser víctima de violencia. "La realidad es que puede ocurrir independientemente del grado de estudios o nivel socioeconómico. Este tipo de creencias puede llevar a las mujeres a sentirse avergonzadas o incapaces de romper el silencio si están siendo víctimas de estos actos", explicó.
Otro mito frecuente, señaló, es asumir que las mujeres permanecen en relaciones abusivas por elección. Este pensamiento ignora la complejidad de la violencia psicológica, un tipo de abuso que, aunque no visible, tiene efectos devastadores.
"La violencia psicológica puede ser difícil de reconocer y se normaliza por los roles rígidos de género, los usos y costumbres, y los patrones conductuales aprendidos en la familia de origen. Esta normalización de los abusos impide que las víctimas reconozcan que están viviendo una situación de violencia", afirmó la Psic. Zazueta.
Asimismo, mencionó que las consecuencias de la violencia psicológica son graves, incluyendo la indefensión aprendida, la baja autoestima, la ansiedad y la depresión. Efectos psicológicos que limitan la capacidad de las mujeres para gestionar estrategias que protejan su integridad física y emocional.
"Como sociedad, es crucial dejar de culpabilizar a las mujeres por su situación de abuso. Debemos reconocer y llamar a estos actos como lo que son: ataques contra su dignidad y concientizar que existe el derecho a una vida libre de violencia", enfatizó.
Finalmente, la especialista subrayó la necesidad de fortalecer el acceso a recursos y mecanismos de apoyo. Los organismos encargados deben garantizar procesos legales ágiles y efectivos que restituyan los derechos de las víctimas, además de brindarles protección y seguridad para superar su situación.
